Entre los dulces de fechas especiales, ¡no puede faltar un roscón de Reyes para acompañar a los regalos!
Al igual que mis trenzas y ese tipo de bollos, lo importante del roscón y, lo que lo va a diferenciar de muchos otros, es que nos quede un bollo suave y esponjoso y eso sólo se consigue amasando con mucha paciencia y tiempo suficiente. Recordad que la masa nos tiene que quedan bastante pegajosa y que amasarla será complicado. Ayudaos de las paletas que os mostré en la receta de bollos de mantequilla y haced los movimientos envolventes para introducir aire en la masa. Cuando más tiempo dediquemos al amasado, mejor será el resultado.
Nivel de Dificultad: 2
Ingredientes:
Para el roscón:
- 550 gramos de harina de fuerza
- 125 gramos de mantequilla
- 30 gramos de levadura de panadero (o fresca)
- 5 gramos de sal
- 150 gramos de azúcar
- 200 mL de leche
- 3 huevos
- Agua de azahar
- Piel de media naranja y de medio limón
Para decorar el roscón:
- Un huevo batido
- Frutas escarchadas
- Almendras fileteadas
- Azúcar perlado (granulado)